Un poco más sobre sincronicidad
El
universo y la historia humana presentan un aspecto integrado en que los sucesos
nos son tanto el resultado final de vínculos causales sino que son aspectos de
un patrón global que es que es el resultado de ciertos “poderes inmanentes”.
F.
David Peat en “Sincronicidad, puente entre mente y materia”, pág. 49
El autor, del citado libro
en el capítulo 3º del mismo titulado “El
universo vivo”, abandona el mundo lineal de la causa y efecto, para
adentrarse, poco a poco en estructuras más complejas. Estos días se está
realizando la prueba ciclista “Vuelta a España 17” y si nos fijamos en los
ciclistas, cuando pueden tener un comportamiento individual, dentro de sus
posibilidades, van más de prisa, más despacio, giran a derecha o izquierda, es
decir “van a su aire”; pero otra cosa es cuando forman parte del pelotón.
Siguen siendo individuales; pero el pelotón tiene sus leyes, que se estira, se
comprime, forman abanicos y tiene vida propia… Todos hemos visto como algunos
ciclistas que van con ventaja, muchas veces son alcanzados a pocos metros de la
meta, por la “pisonadora” del pelotón. El autor, pone ejemplos más complicados,
como el comportamiento de los electrones en un metal, que forman un “gas” que
se mueve libremente entre el “enrejado” de los átomos que forman el metal. “Los físicos los pueden considerar como
libres o, como mínimo, cuasi-independientes. Su movimiento es parecido al de un
enjambre de abejas alrededor de una colmena… Cuando se añade un poco más de
energía al metal, se une con el gas de los electrones y estos se mueven más
deprisa, de modo que la confusión y el caos parecen más pronunciados. No obstante
cuando esta energía alcanza un punto crítico, el caos electrónico se transforma
en un tipo totalmente nuevo de comportamiento, pues el gas comienza a oscilar como un conjunto con lo que se
llaman vibraciones de plasma” oc. Pág. 51, o como el comportamiento del
moho del cieno. Una colonia de estos organismos microscópicos, está formada por
un gran número de células parecidas a amebas, independientes, que se alimentan
de la vegetación del suelo del bosque, que se multiplican a través de la simple
división y de este modo se extienden comiendo todo lo que encuentran, hasta que
la colonia agota todos los alimentos que la rodea. En este punto crítico, señales
químicas se mueven entre las células, como ondas, y accionan una forma de
comportamiento totalmente nueva. Las células individuales ahora empiezan a
congregarse y los distintos elementos de la colonia se transforman en un solo
organismo multicelular, parecida a una babosa y empieza a extenderse por el
suelo del bosque y cuando llega a un lugar adecuado, se levanta y desarrolla
una cabeza de largo tallo, en la que se forman esporas que maduran hasta ser
esparcidas, que cuando se establecen producen células individuales que inician
otra vez el proceso.
Este orden colectivo,
también puede encontrarse en el mundo de las hormigas, abejas, avispas y
termitas. Y en el comportamiento humano individual y colectivo en el público de
un partido de fútbol u otra manifestación colectiva. Cada miembro del público
es un individuo con recuerdos, deseos, objetivos y necesidades; pero el público
tiene se propia dinámica. Una multitud por tanto puede comportarse de maneras
que parecen ajenas o incluso repulsivas al individuo; pero el individuo está
plegado en el público y el público en el individuo, y cada uno parece ser a la
vez interior y exterior.
Todo esto lo podemos leer
en el libro citado al principio entre las páginas 49 y 52. A continuación el
capítulo se “complica”, pues habla de El mundo no lineal, Solitones, Estructuras
disipativas y en en el apartado Estructura y sincronicidad, leemos
en la Pág. 61 “la conciencia puede
implicar una forma de significado que surge de un fenómeno más profundo y que
está sostenida por este… la mente de algún modo, puede contener la naturaleza
entera de este fundamento. De esta manera, los patrones significativos de la
sincronicidad, que se manifiestan en la materia y también en la mente, representan
el despliegue de un orden más profundo que está más allá de la distinción de
ambas. Por tanto la sincronicidad es la expresión del potencial o significado
que contiene un determinado punto de existencia”
Esto da que pensar y
mientras pensamos, lo dejamos aquí, para seguir en otra entrada próxima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario