jueves, 22 de junio de 2017


Cofradía del Santísimo
de La Alberca (Salamanca)
Corpus 2017



 Boletín nº 20 -16 de junio de 2017
Presentación
Comentario a la Palabra
Emaús
La Biblia contada a los niños
Recordando otros tiempos
 Noticias y avisos

  
Presentación
“La unión vital y de por vida”

En una de las últimas clases de Teología en San Esteban, alguien comentó si tenía sentido el esperar a sentarse, después de cerrar el sagrario. El dominico P. Jorge, nos dijo, que está bien; pero que Cristo, además de en el sagrario, en donde no podemos encerrarlo, ya que está en la Asamblea y por eso, él tiene la costumbre de que al pasar, de un lado a otro del altar, después de la comunión, inclinar la cabeza, mirando a los fieles, pues Cristo, que está en el pueblo reunido después de la comunión.
De la misma manera, Cristo en la procesión de Corpus, recorre nuestras calles en la custodia, y al mismo tiempo va con nosotros en la procesión y sube a visitar a los ancianos de la residencia; pero ya estaba allí esperándonos y allí se queda, cuando baja en la custodia con la procesión y preside el ofertorio en el Solano; pero sigue estando con los fieles y cofrades, a no ser que nosotros, no queramos que nos acompañe. Él, sin embargo,  es paciente y siempre nos espera.
Por ello tiene sentido sacar nuestras mejores galas a los balcones y ponernos el mejor traje en este día; pero no basta. Es condición necesaria; pero no suficiente. Corpus es el día Nacional de Caridad y no hay que olvidar, que “Lo que le hagamos al prójimo, se lo hacemos a Él”
He tomado prestado el título de esta sencilla presentación, del libro “Los Riesgos de la Palabra”, del profesor y sacerdote “Luis Cencillo”, que titula de esta forma, la homilía de la festividad de Corpus, que aparece completa en él. Tomo unas notas de la misma: “Hoy es uno de esos días en que es muy claro lo que hay que decir,… aunque hay que acentuar algo que la costumbre nos ha llevado a ver, quizá con una cierta rutina; porque, al fin y al cabo, la Eucaristía no es un sacramento más…, Sino que además, es la anticipación escatológica de la venida de Cristo: o sea que es a la vez señal y realidad, y los demás sacramentos son en sí un signo,… pero aquí es la realidad por encima de la historia, y en dos sentidos, hacia el pasado, porque reactualizamos (como dice San Pablo: Celebraréis la muerte del Señor hasta que vuelva) la Crucifixión y la Resurrección y en un sentido futuro, porque anticipamos su venida…
En realidad Jesús siempre está viniendo y estando con nosotros, eso es lo que quiere decir escatológico [que] no quiere decir que al final del tiempo se va a producir un acontecimiento más, que en este sentido sería histórico,… sino que está superpuesto a la historia…
Cosme Puerto, nos envía su comentario a la Palabra de este día, para que la meditemos y hagamos que forme parte de nuestra vida.
El P. Ramón en este número, nos ofrece unas reflexiones sobre los discípulos de Emaús y a propósito de esto, he buscado en el archivo la “primera carta a los cofrades”, que escribí en setiembre de 2012 y la vuelvo a publicar ahora.
Isaura Díaz, nuestra desinteresada colaboradora, nos envía unas páginas bíblica para niños, por lo que también he “desempolvado” un escrito de Mª Cruz Barés  de 2013, dedicado a los niños y la Eucaristía.
Isidro Barcala,  da pie a la nostalgia, al recordarnos los años 50-60. Hoy ya nose corre para ir a misa…

miércoles, 21 de junio de 2017

“Todavía no estoy preparado”
Gerardo García Cuesta (in memoriam)

Todo cambia, todo fluye, no puedes bañarte dos veces en el mismo río
Heráclito

En el 65  éramos “los chico del Preu”, Gerardo, Antonio, Miguel, Eduardo, Saturnino…  Nos identificábamos con aquella película protagonizada por Carina. Parece que fue ayer; pero han pasado los años… y un día me encuentro con Gerardo y me dice: “Pedro, tenemos que celebrarlo, cumplimos las bodas de oro de nuestra promoción” y comenzamos a contactar con compañeros, y fijar reuniones, los domingos en el Casino. La experiencia tuvo sus luces y sombras; pero no es ahora el momento de valorarla. Lo que sí es digno de resaltar es que a raíz de esta experiencia, conocí  a Gerardo… después de cincuenta años de haberlo conocido en el colegio. Me explico:
Gerardo era una persona generosa, altruista, que no toleraba la injusticia y por tanto le indignaba la corrupción en los políticos y en cualquier estamento… era un seguidor de Jesús de Nazaret, sin que se diera cuenta de ello. Recuerdo, que programamos una comida, para festejar los cincuenta años de la promoción a la que asistimos menos de veinte compañeros; pero antes programamos una eucaristía, en la capilla del colegio, a la que sólo asistimos cuatro: Antonio, el sacerdote de la promoción, Eduardo, Gerardo y yo. He dudado en poner la foto, pues no me atrevía a publicarla en esta entrada; pero al final me he decidido, ya que es uno de los momentos, de mi vida que se han quedado grabados en mi memoria. Al preguntarnos Antonio, si íbamos a comulgar, Gerardo responde “Yo no estoy preparado”. ¿Y quién lo está amigo Gerardo, que estás en los cielos?
Lo que he conocido de Gerardo, y que apunto ligeramente en el párrafo anterior ha sido, por este encuentro de las bodas de oro. Y nos ha unido una amistad sincera desde 2014. Siempre que podíamos quedábamos para tomar un café o un vino, él, Antonio y yo. Pasábamos un rato agradable y de vez en cuando nos hablaba de su gran pasión: La Micología. ¡Cuánto sabía Gerardo, de setas, hongos y líquenes…! Y lo contaba con pasión. Nos enviaba trabajos suyos, conferencias, trabajos relacionados con el tema, por correo electrónico. También tenía gran sensibilidad para la música y a veces me enviaba a mí, que también me encanta la música, vídeos de Youtube de compositores desconocidos; pero de unas composiciones preciosas…
Muchas veces me decía: “Pedro vamos a la editorial de la Universidad, que tienen unos libros preciosos en promoción”. Allí íbamos y charlábamos con los funcionarios que allí estaban y casi nos hacíamos amigos.
Amante de su familila, nos hablaba con pasión de sus hijas y de la novela “El renacimiento de Eva”, escrita por una de ellas, de los viajes que hacían juntos, de Macotera, su pueblo…  Solía comentar una frase que se me quedó grabada: “Cuando se muere un viejo, desaparece una biblioteca”. Él no era viejo… todavía; pero si ha desaparecido una biblioteca.
Estábamos en un grupo de whatsapp, y hace poco, veo que Antonio, se dirigía a Belén y pensé, Antonio se ha equivocado de grupo… por desgracia, no se equivocaba. Se dirigía a su hija, que nos informaba de que a su padre, Gerardo, le había dado un derrame cerebral. Le enviamos oraciones y energía positiva, que sin duda, aunque no le sirvieron para curarse, le sirvieron para el tránsito definitivo.
Para terminar, os envío uno de los últimos correos que me envió:

- Ultimas fotos de Curiosity, Opportunity...

SALUDOS GERARDO


Descansa en paz amigo Gerardo

domingo, 11 de junio de 2017

Soto descubre la ley de la caída de los cuerpos 60 años antes que Galileo

Dado el interés del tema y a petición de alguien interesado, repito  la entrada de este mismo blog, el 2 de junio de 2016. En conferencia del Dr. José Ramón Jiménez Cuesta, impartida el 14 de Mayo de 2016, dentro de los actos del Jubileo Dominicano, hizo mención a este tema, que ampliamos con la información que aparece en
     el libro “San Esteban de Salamanca, Historia y Guía (Siglos XIII-XX)", de José Luis Espinel, O.P. (Editorial San Esteban, Salamanca),  en la página 102:  

La contribución de Soto a la ciencia,
no es muy conocida; pero fue un pionero de la ciencia actual




SOTO DESCUBRE LA LEY DE LA CAÍDA DE LOS CUERPOS 60 AÑOS ANTES QUE GALILEO"

         Invitado por las universidades de Salamanca y Alcalá y animado por el Cardenal Juan Álvarez de Toledo, Soto se decide a publicar largos estudios de filosofía, física y matemática, “Comentarios a los libros de física de Aristóteles” y Cuestiones a los mismos que aparece en Salamanca en 1545. La obra completa, dos volúmenes, aparece también en salamanca en 1551.

         La importancia de esta obra, según W.A. Wallace (“The calculatores” in early Sixteenth-Century phsics, en The Brritish Journal for the History of Science 4 (1969) 230 y otras obras del mismo autor, en que se ocupa de Domingo de Soto) especialista que más la ha estudiado, estriba en que Soto “trata de ofrecer un mínimo de aparato matemático de lo que llegaría a ser la ciencia de la mecánica, y en un pasaje que ya fue notado por Duhem proporciona la formulación más antigua conocida de lo que después fue conocido como la ley de la caída de los cuerpos de Galileo”. Soto dice: “Donde un peso (molis) cae de los alto por un medio uniforme se mueve más velozmente en el final que en el principio. Pero la velocidad de los proyectiles en el final que en el comienzo y de tal manera que el primer movimiento se intensifica uniformitter diformis, mientras el segundo disminuye uniformitter diforme”

         La expresión latina de Soto: uniformiter difformis tiene como traducción exacta “uniformemente acelerado” para la caída, y a la inversa para la subida. Duhem, en su obra de principios de siglo, descubrió la originalidad de Soto. Actualmente e interesan por esta doctrina de Soto sobre todo los investigadores anglosajones. La ciencia reconoce hoy que Soto formuló la ley de la ley de la caída de los cuerpos unos 60 años antes que Galileo. Galileo conoció algunas obras de Soto y le cita, aunque no en este principio. Aunque la obra de Soto fue famosa, la parte de la misma donde formula esta ley y otras del movimiento no fue bien conocida, precisamente por su aparato matemático. Báñez colaboró con Soto en estos estudios. La física de Soto se publicó en Venecia en 1582 y se divulgó en el norte de Italia en seguida: galileo estudió en Pisa y Padua desde 1584. Por otra parte, la doctrina física de Soto fue divulgada en Italia por los jesuitas españoles discípulos de Soto, Francisco de Toledo y Benito Pereiro. En América divulgó la doctrina física de Soto su discípulo el agustino Alonso de Veracruz “padre de la filosofía mejicana”, que escribió Physica Speculatio editada en Méjico en 1557 y luego en Salamanca en 1562 pero no recoge la parte matemática y por lo mismo la ley aludida”.

         En la Guía a de Espinel, cuenta que Soto por aquellos años, estaba ocupado en traer trigo a Salamanca, desde Toledo, para remediar una gran hambruna, que afectaba a los estudiantes pobres de la Universidad y dedica más párrafos a este singular fraile; pero, en esta sencilla entrada prefiero centrarme sólo en este tema y no me resisto a mostrar mi indignación, porque no se propague la obra de estos singulares personajes en colegios e institutos y a defender y valorar nuestro patrimonio, que es mucho y muy importante.