jueves, 12 de octubre de 2017

Sincronicidad
Cap. 7, la Fuente Creadora (2)

 “El universo puede haber surgido de un  big bang de una energía ilimitada. Pero considerándolo desde otra perspectiva, incluso, esto es sólo una pequeña “ondulación” dentro de la enorme actividad del fundamento, que surge de una fuente eternamente creadora que está más allá de los órdenes del tiempo”.
Sincronicidad, F. David Peat, Pág. 138

Fotografía de Clara G. 

Seguimos, tomando notas de este magnífico libro de F. David Peat, el cual sin embargo, no nos aclara “casi nada”; pero que nos fija, si cabe más en el Misterio. Nuestra mente no puede enterarse completamente de lo que pasa y de cómo funciona el mundo. Me viene a la mente la parábola del niño-ángel de San Agustín. Nuestra mente es un pequeño “pozuelo”, comparado con el mar de la inteligencia infinita. Por lo que advierto al posible lector de estas líneas, que si quieres enterarte de algo, abandone. No es este el sitio, aunque si puedes profundizar en el misterio, alejándote aún más de las posibles certezas.
Ahora nos situamos en la página 135, en el apartado El estado de vacuidad, en el que comienza haciendo un repaso histórico somero del pensamiento de Demócrito y Leucipo,  según el cual el mundo está compuesto por átomos, mientras que Heráclito, sostenía que la naturaleza surgía de un flujo primordial  en el que existe un movimiento constante entre la unidad y la diversidad. “El uno está compuesto de todas las cosas y todas las cosas se derivan del uno”. A principios del siglo XX, la moderna teoría cuántica, parece confirmar la intuición de Demócrito y Leucipo. Pero en la versión del campo cuántico, los procesos elementales ocurren dentro de un fondo que es parecido al de un flujo eterno.
         Según esta segunda teoría, las partículas elementales están en un estado constante de formación y disolución dentro de lo que se llama el estado fundamental o estado de vacuidad.
Y en esta misma página, la 136, leemos: “Paradójicamente, la nada del estado fundamental, del que se sostiene el universo, es un vacío y un pleno. Es un vacío porque, al igual que en concepto cotidiano del espacio vacío, la materia puede moverse a través de él sin interrupción. Pero también es un pleno porque está infinitamente lleno de energía… Al igual que Atum-Re creó los dioses del océano primordial, las partículas elementales y el universo mismo surgen de un “mar de energía” hirviente que tiene la apariencia de la nada…
Más adelante señala, como los sistemas mecánicos aislados del resto del universo agotan su energía, con el tiempo, como las baterías de os coches y las estrellas, que acaban muriendo, esto no se aplica al mundo cuántico, porque el estado de vacuidad tiene un potencial infinito y su energía ilimitada provoca, no sólo las partículas elementales y todas las transformaciones de energía, sino incluso el espacio-tiempo.
En la siguiente página cita al físico teórico John Weeler, que ha descrito gráficamente el caso de un espacio-tiempo cuyo origen está en el mar infinito de energía, conocido como el estado de vacuidad, con el símil del mar, visto desde un avión a gran altura, o visto a pocos metros de la superficie, o visto desde un bote, en el que las olas se convierten en espuma al romper, anotando que el espacio está compuesto por una estructura parecida a la espuma.
Para terminar las notas tomadas en este apartado, cito literalmente, de la página 138 un concepto abstracto y escurridizo: “La gran teoría unificada de las partículas elementales destaca el papel de las simetrías abstractas durante las primeras fracciones del big-bang. Poco antes de su muerte, Heisemberg afirmaba que los niveles más profundos de la realidad no implican partículas, sino simetrías… Estas simetrías se llaman abstractas porque son muy distintas a las simetrías normales,… que se encuentran por ejemplo en un copo de nieve… más bien son las simetrías de campos cuánticos, que se definen en espacios matemáticos abstractos. Según estas teorías, el estado fundamental del vacío posee un alto nivel de simetría, que es “roto” progresivamente por la aparición de partículas elementales
El siguiente apartado, La pléroma, hace alusión a la clave de la cosmogonía de C. G. Jung, término antiguo que tiene su origen en los mitos gnósticos de la creación y significa un fundamento o “divinidad” del que nace toda realidad, y acompaña una cita de “VII sermones ad mortuos” que reproducimos aquí:
Escuchad: Yo empiezo con la nada. La nada es igual a la plenitud. En la infinidad, lleno no es mejor que vacío. La nada está vacía y llena […] Una cosa que es infinita y eterna no tiene cualidades, puesto que posee todas las cualidades.
La nada de la plenitud la llamamos la pléroma. Allí dentro terminan el pensamiento y el ser”.
Y más adelante en la página 140  “…en la teoría del universo de la mente y la materia de Jung, toda realidad se encuentra en la creatura, que tiene su fundamento en la plenitud de la pléroma… Es dentro de este movimiento básico que deben surgir los arquetipos… Las sincronicidades que han sido llamadas la activación de los arquetipos, ya no implican simplemente una forma ocasional de coincidencia, sino la relación significativa esencial entre los aspectos  mentales y materiales del universo
A continuación, cita la obra del lógico y matemático  G. Spencer-Brown, según la cual “La generación de la forma empieza con la nada, una página en blanco en el cuaderno del lógico, un vacío una pléroma. En este vacío se coloca una sola marca, una línea en una página en blanco. Esta es la primera distinción… el acto inicial de creación, el dibujo de una distinción dentro del vacío, y de este surgirá un mundo de dualidades y opuestos que llevan hacia la generación de la forma y del tiempo” Pág. 141.
Más adelante cita a Hegel, según el cual el mundo surge del fundamento del ser y la nada a través del movimiento de la dialéctica y apunta que la lógica de Spencer-Brown, de Jung o los mitos de la creación no es una forma estática sino que es  la imagen de un acto creador de percepción dentro de un vacío sin contexto y yo me pregunto ¿Quién hace el primer acto de percepción?
Cita posteriormente a los tibetanos, en el que las fuerzas cósmicas encuentran su equilibrio perfecto en el Bardo. A Nicolás de Cusa, a Meister Eckhart, del siglo XIII, para el que esta actividad es Dios, que fluye de la divinidad que es la fuente de toda potencialidad y la resolución de toda distinción.
Termina este apartado, con una referencia a los nombres  y a los mantras. El nombre no se escoge accidentalmente, sino que sus vibraciones deben estar en armonía con el cuerpo, el pensamiento y el universo y establece las primeras categorías que más tarde llevan a la estructura entera del pensamiento y termina el apartado con la siguiente frase: “la percepción creadora que actúa dentro del vacío sin contexto, por lo tanto se equipara con el nombre o la palabra, cuyas resonancias existen antes de toda forma y estructura. Al igual que la fusión de dualidades libera energía de la pléroma a la creatura, esta energía se simboliza en las vibraciones físicas y mentales del hombre” Pág. 148
Pasa al siguiente apartado, titulado Contextos y estructuras,  en el que leemos, Pág. 148 “La formación de distinciones, dualidades y categorías es el primer paso en ordenar el mundo. Las categorías existen  antes que el lenguaje y la razón, pues es a través del ordenamiento de categorías que estructuras de pensamiento pueden surgir y la mente puede responder de un modo racional al mundo explicado. Las primeras distinciones que se crean por medio de un acto de pura percepción no requieren ningún contexto. Pero en su surgimiento del vacío también empieza a formarse un contexto que es capaz de actuar recíprocamente sobre estas categorías. Es a través de este movimiento bilateral entre contextos y categorías, o dualidades, que se establece el significado”.
Leemos más adelante “Un flujo de significado se puede percibir claramente mientras se escucha música, lo que el compositor Edgar Varese ha llamado la “corporización del pensamiento” Así, tomando como ejemplo las cuatro primeras notas de la Quinta sinfonía de L. V. Beethoven, al escuchar las notas que surgen del vacío, por primera vez, están desprovistas de significado; pero si se le da un contexto inicial, como “el destino llama a la puerta” o cuando fueron emitidas por la BBC  durante la segunda guerra mundial, como símbolo de libertad, establecen sus resonancias en la mente y producen una gran variedad de predisposiciones y esperanzas en el oyente. Esto es, en efecto la generación del primer contexto y mientras la música sigue sonando, este contexto empieza a crecer. Arnold Schónberg mantenía que todos los temas de esta sinfonía, e incluso su estructura íntegra, se derivan de sus primeras estrofas.
Y termina este apartado, Pág. 149 “Del mismo modo, una distinción o dualidad aparece por primera vez en un vacío, para crear un contexto. Mientras la distinción y el contexto crecen juntos, crean un mundo cambiante de orden y significado, que nunca se puede fijar sino que actúa constantemente sobre sí mismo
Pasamos finalmente al último apartado de este capítulo, Conclusiones y resumen. Y leemos Pág. 149 “El universo surge de una fuente creadora, cuya acción principal es una percepción incondicional en el vacío que, provoca las primeras distinciones y dualidades sin contexto. Estas dualidades, que fluyen de la fuente, crean un contexto cambiante que luego actúa recíprocamente sobre ellas para producir una discriminación y diferenciación continua”.
Y en la siguiente página: “La sincronicidad fluye de este movimiento, que da a su sujeto un sentido del significado más profundo del universo y una intuición de los movimientos que fluyen de su fuente creadora. Pero esto plantea una pregunta importante: ¿Por qué este proceso, que provoca y sostiene el universo entero de la mente y la materia, parece ser tan singular e inusual que se experimenta solamente durante una sincronicidad o una epifanía religiosa?... ¿Por qué la sincronicidad se debe considerar una coincidencia aislada de la mente y la materia, cuando una sola  fuente esencial da origen al universo en cada momento eterno?”
Es lo que nos preguntamos muchas veces, cuando pensamos, que Dios nos ha abandonado, y esto no lo dice el libro, lo pienso yo. Termina el capítulo con la promesa de responder a ello en el próximo y último capítulo.  Ya veremos…


No hay comentarios:

Publicar un comentario