La “trampa” de las funciones discontinuas
Si
una función, no está definida en un punto x = a, y sus límites laterales por la
derecha y por la izquierda, son + ó -
infinito y – o + infinito, respectivamente, la función en ese punto presenta
una discontinuidad de primera especie, (de salto infinito). La recta x = a es
una asíntota vertical.
No
es mi intención explicar la teoría de las funciones continuas en este sencillo
blog, sólo quiero contar lo sucedido una mañana de primavera, en el instituto
donde yo daba clases, “in illo tempore”, como un ejemplo de sincronicidad
divertido, después del tema tratado en anteriores entradas. Si voy hacer una descripción muy somera de la
función, representada en la figura, cuya ecuación es
y =
1/(x-5)
Esta
función tiene por dominio, el conjunto de los números reales, excepto el 5, su
límite, cuando x tiende a + infinito es cero y cuando x tiende a – infinito también
es cero. El eje de abscisas es una asíntota horizontal. Corta al eje de
ordenadas en el punto (0, -1/5), no corta al eje de abscisas y en x=5, no tiene límite; pero el límite
lateral, cuando x tiende a 5 por la izquierda es – infinito y por la derecha +
infinito. La recta x=5 es una asíntota vertical. La curva representada es una
hipérbola equilátera.
Cualquiera
que haya hecho el bachillerato o cualquier estudiante despierto, sabrá
interpretar estos datos. No es el lugar de explayarse más en esto, pues quería
contar lo siguiente:
Como
decía era una hermosa mañana de primavera, desde el aula iluminada, primorosamente
por el sol, que incidía en la ventana y un grupo de pocos alumnos y bastantes
alumnas, yo me disponía a explicar la teoría de las funciones continuas y
habiendo representado una curva, un poco más complicada, que la que aquí pongo,
con tiza de yeso, sobre un encerado, bastante brillante, donde no se veían bien
los trazos (¡Cuanto peleé yo, por los reflejos en los encerados!). No teníamos,
ni cañones de luz, ni pantallas, ni proyectores y por supuesto, ni ”Powerpoint”,
aunque ya andábamos, manejando los “segundos” ordenadores, los Olivetti M-19,
con discos flexibles de 5,25 pulgadas (no tenían disco duro). Los “primeros”
fueron los famosos “Spectrum”. Perdón, se me olvidaba lo de aquella mañana
soleada… Pues bien, una vez representada
en la pizarra la función, recuerdo que dije: “vamos a recorrer esta curva desde
–infinito a +infinito” y comienzo a recorrerla, explicando los intervalos de
continuidad, puntos de cortes con los ejes, intervalos de crecimiento y decrecimiento
máximos, mínimos, concavidad, convexidad, puntos de inflexión… y en esto que
nos aproximamos por la izquierda hacia + infinito, a una asíntota vertical, con
salto infinito y recuerdo mis palabras, como si fuera ahora mismo: “Vamos a caer en una trampa”, para
indicar que pasaríamos a – infinito y en ese momento
¡la pizarra se
desprendió de sus anclajes y cayó verticalmente a plomo hacia el suelo!. Imagínense
el revuelo. Y yo dando gracias que no me hubiera pillado los pies. Y es mejor
terminar aquí, sin más comentarios.
No hay comentarios:
Publicar un comentario